En el Perú el 25 de mayo se celebra el Día de la Educación Inicial, esta se imparte a los niños en su primera infancia y tiene como objetivo que los menores desarrollen sus habilidades psicomotoras y cognitivas así como sean seres auténticos que desarrollen sus capacidades a su ritmo, compartan sus emociones y que sean apreciados tal y como son. Debido a la emergencia sanitaria originada por el Coronavirus, ha generado que la educación de nivel inicial continúe dictándose de manera virtual.
¿Cuál es la importancia de la educación inicial?
La formación inicial en los niños es muy importante porque les permite dar inicio a la escolaridad, en donde aprenden, exploran y adquieren nuevos conocimientos que se convertirían en los cimientos para su vida en el sistema educativo.
Durante esta etapa, los infantes aprenden a comunicarse y compartir sus emociones así como ser tolerantes e independientes. Ello lo logran a través de procesos de estimulación que consolida su conocimiento cognitivo, motriz, afectivo y social.
Actualmente, debido a la coyuntura por la pandemia este proceso se virtualizó, por tanto las docentes tienen una misión de adaptar la metodología de enseñanza que poseen y hacer uso de los recursos tecnológicos para el dictado de las clases.
Otro de los aspectos que debe tomarse en cuenta es que al permanecer los menores tantos tiempos en sus viviendas, los padres deben dosificar el tiempo no solo con sus actividades relacionadas al aprendizaje, sino también compartir momentos de juego.
La Mg. Evelina Cárdenas Llamosas, especialista en educación inicial de la casa marianista, señaló que es necesario crear oportunidades de juego con los niños, por ejemplo cuando los padres están en el carro trasladándose de un lugar a otro, pueden jugar a mencionar distintos elementos que observen en la calle de un color determinado, este tipo de dinámicas permitirá trabajar la observación y la atención, lo que motiva al niño a que se exprese.
Otra de las recomendaciones que realizó la especialista a los padres de familia es que en vez de ponerles el celular para comer, puedan crear una historia o cuento con los alimentos y fomentar que el infante se exprese. Hay que destacar que los adultos son el modelo de regulación emocional para los niños.