El último sábado se realizó la décima tercera edición del gran Corso por la Vida y la Familia que congregó a más de 200 mil escolares y universitarios quienes recorrieron las principales calles de la ciudad blanca, expresando mensajes en defensa del niño por nacer, de la madre y de la familia.
La Universidad Católica de Santa María se hizo presente con las facultades de Enfermería y Obstetricia, delegación encabezada por sus decanas Dra. Sonia Núñez Chávez y Mg. Ricardina Flores Flores, respectivamente.
Los estudiantes y docentes desfilaron vestidos con polos identificando a la casa santamariana, portando globos de color verde y gritando a viva voz mensajes en defensa de la vida.
Durante el recorrido se pudo ver a estudiantes, docentes y religiosos con consignas y pancartas que rezaban “un latido, una vida”, “quiero nacer”, “en el primer instante surge la vida”, “toda vida importa”, “quiero vivir”, etc.
“La vida es el primer derecho humano y eso lo compartimos todos. Basta tener sentido común para entender que no hay necesidad de matar a un bebé en el vientre de una madre”, aseguró una atribulada madre de familia que apreciaba el corso.
En la plaza de armas se instaló un escenario donde un portavoz tomo el micrófono para reforzar el concepto de la “defensa de la vida desde la concepción”, que compartieron todas las delegaciones participantes en la marcha.